All in, de Javier Gimeno

Título: All in

Autor: Javier Gimeno

(Información extraída de Amazon):

Longitud de impresión digital: 206 páginas

ASIN: B00U3WKBHW

Resumen 

Daniel es un joven de origen humilde y gran inteligencia que ha sido golpeado en su niñez por la dureza de la vida en las cuencas mineras del norte de España. Inesperadamente, se embarca en un involuntario viaje de descubrimiento y crecimiento personal que le llevará a conocer de primera mano lo mejor y lo peor de la esencia del ser humano a través de su interacción con una pléyade de personajes secundarios que moldearán su carácter, paso a paso, hasta convertirle en un hombre nuevo que toma las riendas de su vida y la encamina a un inesperado y moralmente cuestionable clímax.

"All in" es una fabulosa historia coral con ricos personajes que hacen su particular descenso a los infiernos en un mundo de extremos en el que nada es lo que parece. Amor, odio, pasión, ira, miedo; todos los sentimientos humanos tienen cabida en esta historia de venganza en la que el lector es obligado a replantearse continuamente su posición ante los dilemas morales que se plantean a cada paso.

MI OPINIÓN

Javier Gimeno contactó hace ya algún tiempo conmigo para ofrecerme la lectura de su libro y pedirme mi parecer y mi reseña. Desde aquí, darle las gracias por confiar en mí y pedirle disculpas por la demora, pero estos últimos meses (y estoy contenta por ello, porque es una señal de la buena salud del blog) he ido bastante de bólido con las lecturas y las reseñas pendientes y prometidas. ;)

All in es una breve novela que no llega a las 200 páginas, dividida en 30 capítulos y un epílogo. Os tengo que confesar que al principio de la lectura me sentí bastante desubicada porque, aparte de la deslocalización de los hechos y los continuos flashbacks temporales en la estructura de la obra, en cada capítulo aparecían diferentes personajes que, a priori, no tenían nada que ver con los anteriores. Eso sí, en cuanto llegué al capítulo 7 u 8, todo empezó a tomar forma y poco a poco fui cogiéndole el sentido a la historia.

Estamos delante de una novela negra, narrada en tercera persona y con un lenguaje muy sencillo que nos facilita perdernos entre sus páginas e ir avanzando rápidamente una vez que le cogemos el hilo.

El personaje absoluto del libro, a mi parecer, es Daniel y su peculiar historia de venganza, llevada hasta sus últimas consecuencias. De niño sufre junto a sus padres la terrible pérdida de su hermano tras un accidente laboral, y este hecho le marcará profundamente para el resto de su vida. De ahí su personalidad tan compleja. Podríamos decir que Daniel ocupa el círculo central del libro y a su lado, a modo de satélite, se van colocando diferentes esferas con el resto de personajes que van apareciendo y que van dibujando su historia: su mujer Nora; su amigo Miguel; el mafioso JR; la preciosa Mamen; el rifeño Abdes; Víctor, su esposa y su hijo; el maestro de póker Alfredo; León…Todos ellos tienen una conexión con el protagonista que iremos descubriendo a medida que vamos avanzando en la lectura. Aquí tengo que decir que me quito el sombrero ante la complejidad narrativa y estructural de este punto. Pero no hay que olvidar otro elemento que, por su importancia, bien podría ser por sí mismo otro personaje de peso: el póker. Por él entendemos el título y entramos en un mundo lleno de horror y gente sin escrúpulos. Ha habido momentos en que he tenido que dejar aparcado el libro a causa de la crueldad, la violencia y el pánico que me provocaba verme sumergida en algunas escenas protagonizadas por este juego y la maldad de los seres humanos salpicados por las partes negativas del mismo.

Pero como sabéis que siempre me quedo con lo bueno, me gustaría destacar que es la primera novela de Javier y que, dejando de lado algún que otro error de sintaxis y gramática, me ha parecido una novela de suspense muy entretenida y muy bien “tejida”. Durante toda la lectura vemos cómo las diferentes historias se van entrelazando, hasta llegar a un final bastante llamativo y lleno de sorpresas. Con el epílogo, Javier ya termina de atar aquellos cabos que podrían estar sueltos y nos regala una obra auto-conclusiva donde todo cobra sentido. ¿Sabéis otra cosa? En muchos aspectos me ha recordado la película “Pulp Fiction”, de Quentin Tarantino (que, por cierto, me encanta), así que esto es otro punto a su favor.

En resumen, que os la recomiendo como ejercicio literario porque, en este sentido, no tiene desperdicio.

¡Muchas gracias por estar siempre ahí! :D