Plantando cara a la infertilidad, de Laura Puerto Martín

Título: Plantando cara a la infertilidad 

Autora: Laura Puerto Martín

Editorial: Círculo Rojo; Colección: Autoayuda

Páginas: 186; ISBN: 978-84-9115-892-9

SINOPSIS

A menudo creemos que podemos decidir cuándo y cómo emprender la aventura de tener un hijo, y planificamos nuestra maternidad: “Tendré un hijo antes de los 30” o “tendré tres hijos”, podemos llegar a pensar. Sin embargo, llegado el momento, muchas mujeres se sorprenden al descubrir que la maternidad no está bajo su control y todos sus planes se rompen. En Plantando cara a la infertilidad la autora relata en primera persona su experiencia personal; una de esas historias en las que lograr ser madre es algo más complicado que decidir cuándo es el mejor momento.

En su larga lucha contra la infertilidad experimenta grandes dosis de miedo y soledad, de impotencia y frustración, pero gracias a su firme determinación todo el dolor acabará por transformarse en una felicidad infinita. Este relato pretende dar fuerza y una luz de esperanza a las parejas que se encuentran en la misma situación. Aunque el camino esté lleno de obstáculos y sea duro y agotador, siempre merece la pena luchar por un sueño.

Biografía de Laura Puerto Martín

Nació en Teruel en 1982, ciudad en la que reside en la actualidad. Está casada y es madre de dos niños. Estudió Ingeniería Técnica en Informática de Gestión, y desde 2008 forma parte del equipo tecnológico de Térvalis Desarrollo. Plantando cara a la infertilidad es su primera obra. Con ella pretende dar fuerza a todos aquellos que sueñan con ser padres y tienen dificultades para lograrlo, así como acercar a las personas ajenas a este problema a los sentimientos que experimentan cada vez más y más parejas.

MI OPINIÓN

Desde que vi este título en las novedades de Círculo Rojo, no podía parar de pensar en él. Gracias a Dios, tengo un hijo y no me he tenido que enfrentar a todas las situaciones que Laura sufre, padece y describe. Pero igual será por el hecho de ser madre que he sentido la necesidad de leer esta obra. No puedo ni imaginarme que si tu máximo sueño (o uno de ellos) es tener un hijo, no poder llevar a cabo este importante proyecto... Y por eso pedí un ejemplar a la editorial, que muy amablemente me envió.

El libro, escrito siempre en primera persona y desde el punto de vista de Laura, la autora, la madre, está dividido en 16 capítulos, un prólogo escrito por uno de los doctores que la asistió y ayudó durante tan largo y doloroso proceso, una introducción hecha por la propia autora en la que nos cuenta por qué se lanzó a la aventura de escribir este relato y un epílogo. Ya sólo leyendo el título de los capítulos nos damos cuenta de que fueron dos años durísimos de altos y bajos emocionales pero con un denominador común: Laura nunca perdió la fe en ser madre. Y esto dice mucho de ella.

Laura se apoyó mucho en su familia y amigas, sobre todo en las virtuales: del foro y del twitter. Se sentía muy sola porque no conocía a nadie personalmente que hubiera tenido que pasar por todo este largo proceso y ellas la ayudaron muchísimo. Por eso, una vez cumplió su sueño y tuvo a sus mellizos con ella, decidió poner por escrito su experiencia y así ayudar a otras mujeres que se encontraran en su misma situación.

Me he llegado a poner en la piel de la autora porque explica con mucho detalle todo el calvario que tuvo que pasar para tener a sus niños con ella. La verdad es que he llorado, me he angustiado, he sufrido mucho pero no he podido dejar de leer el libro. Para mí, es un acto muy altruista que una persona abra su corazón de esta manera para explicar su experiencia, tan personal, a los demás. Laura me ha parecido una excepcional persona que al final ha tenido su recompensa, más que merecida.

Hay dos momentos especialmente difíciles para ella que me gustaría resaltar: el hecho de tener que asumir que para ser mamá tenía que pasar por la técnica de fecundación in vitro y luego, conforme los distintos tratamientos iban fallando, darse cuenta de que no le quedaba más remedio que la donación de ovocitos. Tiene que ser muy duro asumir que has de renunciar a tus genes. Pero todo sea por tus pequeños.

También me emocionaron muchísimo la "transfer", el parto, su lucha diaria para que sus pequeñines salieran adelante para poder llevárselos a casa cuanto antes... 

¿Pero sabéis qué? Me quedo con la siguiente reflexión, que encuentro que es preciosa:

“El camino es muy duro pero merece mucho la pena. Que al final se te olvida todo. Hay muchos obstáculos, te caes muchas veces, pero si te levantas y sigues al final merece la pena. Y habrá chicas que desgraciadamente no lo consigan pero, por lo menos, tendrán la tranquilidad de haber intentado por todos los medios conseguir su sueño. No será algo por lo que no hayan luchado.” (1)

 

Laura, su marido y sus dos hijos. Fuente: “Eco de Teruel”

(1)    Cita extraída de la entrevista en el “Diario de Teruel” 

Muchísimas gracias a Laura por haber escrito este libro. Me has llegado al corazón, y seguro que ayudas a muchas chicas que están pasando por un duro momento.

Y muchísimas gracias a mi querida Editorial Círculo Rojo.

¡Un abrazo a tod@s y hasta pronto!