Cuando empecé a investigar para mi tesina sobre Drácula y las
mujeres vampiro, descubrí un tesoro: el relato Carmilla, de Joseph
Sheridan Le Fanu, publicado en 1872. Me gustó y me impactó tanto que decidí
incluirlo en mi estudio.
La historia tiene lugar en Styria donde Laura, la joven narradora, vive en
un vetusto castillo con su anciano padre y unos pocos sirvientes. Carmilla
aparece por primera vez en escena cuando Laura cuenta con tan sólo seis años.
Tras dormirse en los brazos de Carmilla, se despierta sobresaltada al sentir
dos agujas clavándosele en el pecho. Su niñera y el ama de llaves, que entran
en la habitación al escuchar sus gritos, no encuentran a nadie ni marca alguna
en su pecho. Carmilla reaparecerá trece años después, cuando el carruaje en el
que viaja junto con su elegante madre tiene (o simula tener) un accidente cerca
del castillo de Laura, y Carmilla debe quedarse para recuperarse. El resto de
la historia se desarrolla con el suspense de una novela policíaca y la pasión y
melancolía de un inusual relato de amor entre la protagonista y la mujer
vampiro, hasta culminar en un final que ha marcado toda la posterior literatura
de vampiros.
Le Fanu, el autor, estaba tan fascinado por lo oculto que sus escritos
beben directamente de la tradición gótica, del folklore irlandés y de las
ansiedades sociales, políticas y culturales de sus contemporáneos. La atmósfera
de sus relatos está llena del misterio y de la intranquilidad en la que viven
sus personajes, que tienen que enfrentarse a la experiencia con lo
sobrenatural, siempre desconocida y aterradora. Carmilla es un magnífico
ejemplo de su obra.
El relato está dividido en un prólogo y dieciséis partes. Es muy fácil y
rápido de leer y te atrapa desde la primera hasta la última palabra. En él vemos
cómo se va fraguando la amistad entre Laura y Carmilla, la rápida atracción
entre ambas, el creciente acoso de Carmilla hacia su amiga y la siempre última
negativa de Laura ante este hecho.
Poco a poco, el autor nos va dando pistas sobre la verdadera identidad de
la invitada y acabamos sabiendo que Carmilla es realmente un acrónimo de
Mircalla, condesa de Karnstein, una bella joven que fue vampirizada en la flor
de la edad. Alrededor del castillo empiezan a sucederse una serie de extraños
fallecimientos de jóvenes campesinas, que languidecen y mueren rápidamente. Laura
tiene cada noche extrañas visiones y pesadillas, que la aterrorizan y la van
debilitando cada vez más. Pronto le descubren unas marcas sospechosas en la
base del cuello. ¿Os suena de algo?
En medio de estos sucesos, Carmilla mantiene una
conversación muy significativa con Laura, en la que le confiesa:
“Aquella
noche estaba como muerta en mi cama. Me hirieron aquí —se tocó el
pecho— y nunca he vuelto a ser la misma.
—¿Has estado a punto de morir?
—Sí. Un amor cruel, un amor caprichoso había
invadido mi vida. El amor exige
sacrificios. Y en los sacrificios corre la sangre.”
Si queréis saber cómo acaba este relato simplemente tenéis que entrar aquí,
donde lo vais a encontrar entero:
¿Por qué esta narración me impactó tanto
que decidí incluirla en mi tesina? Porque
Carmilla es considerada por muchos expertos en el tema como principal
precursora de la gran novela de vampiros de todos los tiempos, Drácula; porque Le
Fanu incorpora un elemento totalmente innovador y transgresor: Carmilla es una mujer
vampira, una "femme fatale", rasgo que supone un claro cuestionamiento del rol de
la mujer en la época victoriana; porque el anhelo vampírico en Carmilla tiene
una clara connotación sexual y lésbica (la condesa sólo ataca a mujeres con el
deseo de hacerse una con ellas); porque la
estructura gótica del relato, la turbadora narración y su romántica atmósfera convierten
estas escalofriantes páginas en un exquisito deleite para el lector...
Me gustaría terminar con unas palabras de
Laura:
“Incluso ahora, a muchos años de
distancia, la imagen de Carmilla se me aparece frecuentemente en sus diversos y
cambiantes aspectos: unas veces es la hermosísima y lánguida joven; otras, el
monstruo que vi en las ruinas del castillo... Y a menudo, en medio de una
pesadilla, tiemblo de miedo porque me parece oír los leves pasos de Carmilla
que se acercan a la puerta de mi habitación.”
¿Qué os ha parecido mi post de hoy? ¿Os ha sorprendido? (Soy una amante del
vampiro literario. Ya lo iréis viendo, jeje.) ¿Conocíais Carmilla? ¿La
habéis leído? ¿Os animaréis a hacerlo?
¡Un beso enorme, querid@s mí@s!
Nota: el resumen
y las fotos incluídas en este post son de casadellibro.
doncs mira l'apunto per la meva filla, a ella aquestes histories l'encanten!
ResponEliminaGracies per la ressenya ;)
Molt bé! Segur que en quedarà fascinada... ;)
EliminaPues a mí esta temática no me llama la atención ...
ResponEliminaUn beso
Estoy deseando leerlo!
ResponEliminaUn beso.
Me alegro mucho, Dolo! Te encantará. ;)
EliminaHola^^
ResponEliminaTal vez algún día lo lea, pero por ahora no se encuentra en mis prioridades...
Nos leemos =)
¡Hola!
ResponEliminaPues yo no le diría que no a este libro si se cruzase en mi camino.
Muy buena reseňa.
¡Nos leemos! :)
Muchas gracias, guapa!!!!
EliminaNo lo conocía pero a mí todo lo que tenga un poco de relación con vampiros no me va demasiado
ResponEliminaBesos
Lástima, porque Carmilla es muy buena! Un beso.
Elimina